Otro de los talleres que hemos realizado durante este proyecto ha sido un taller de alas de abeja.
Las familias recortaron las alas en cartón. En el cole las pintamos con témpera. Una vez secas, cada niño eligió un color de papel de celofán y pegamos trocitos encima de plástico adhesivo.
De esta manera, pudimos jugar con la luz, que era uno de los objetivos de la actividad, descubriendo sombras, colores, mezclas, luces, y viendo por qué unas veces vemos el color de las alas en el suelo y otras no.
Así de preciosas quedaron... Y lo mejor, todas diferentes, distintas, como las personas lo somos...